ATONTADOS O ¿SALVADOS?


Por cosas de la naturaleza humana, estos últimos días he tenido que pasar unas cuantas horas de cada día acompañando a pensmother en el hospital (no preocuparse, todo bien). Total, que salía yo cansadísima y estresadísima del trabajo para meterme en la habitación del hospital donde la simpática compañera de la cama de al lado tenía siempre encendida la tele con el programa vespertino tan famoso llamado “Sálvame”.

La primera vez yo me dedicaba a mirar hacia otro lado y a resolver junto a mi madre los enigmas del “pasapalabra” o “ahora caigo”, pero había una especie de energía extraña que siempre me hacía tornar la mirada nuevamente a la pantalla de la “compi”. No sé, era como una especie de atracción mística o espiritual... Hasta que finalmente me rendí y me entregué a la visualización de la tele de al lado.

El resultado fue estupendo. ¡Me relajé! Y durante media hora o una hora diaria el mundo y mis problemas dejaban de existir para dar paso a una especie de estado de meditación contemplativa que nunca había experimentado. Y lo más curioso es que si ahora mismo me pidieran un resumen de todo lo que ví, sinceramente, no sabría hacerlo. Tengo un vago recuerdo de un montón de gente vestida de novia, pero nada más.

Es curioso ¿verdad?. A ver si va a ser cierto aquello de la felicidad del ignorante.

Comentarios

J. M. N. ha dicho que…
Estimada pensadora:
Por lo poco que te conozco y lo que he leído de ti, me parece que esos programas no están pensados para personas con un perfil como el tuyo. Ahora bien, la estancia acompañando a un enfermo en un hospital es una experiencia dura ¡y sobre todo tremendamente aburrida! Yo no he leído tanto como cuando acompañé a mi padre en sus últimos días. Y sí, yo creo que, a poco que me lo hubieran puesto delante, me hubiera tragao el programa de Ana Rosa, un partido de fútbol y ¡hasta una corrida de toros! (esto último pa ver si el toro, como decía aquella canción mítica de mi juventud, cumplía con su obligación).
Hoy lo oía en la radio, el joputacabrón de Rajoy y sus 40 ladrones han anunciado una nueva "batería de medidas" coincidiendo con la eurocopa o no sé que cojones...panen et circenses...pa los hombres (como norma) fúmbol, pa las mujeres (como norma también) la Princesa del pueblo y la Pantoja...si es que....asín nos va y asín nos irá.
Me alegro que pensmother esté bien.
Salú y buena primavera
PENSADORA ha dicho que…
jejeje! a lo mejor tienes razón con eso de mi "perfil", pero te digo yo que entré en una especie de estado catatónico que me sentó de vicio, lo prometo por el niño Jesús.

Me parece que de vez en cuando no val mal abstraerse del propio mundo y conocer otros mundos que pueden sorprendernos, luego ya cada uno somos libres de elegir lo que nos gusta y lo que no.

En fin, que como siga empiezo a desbarrar otra vez.

Salud!
Atlántida ha dicho que…
Pens, yo he visto Salvame muchas veces, justo cuando llegaba de trabajar y dejaba de fondo a esos tertulianos dale que te pego peleándose entre ellos, y de repente me veía durante unos minutos sentada frente a la pantalla, pensando que el programa es malísimo y barrio bajero, pero como tú dices sin pensar en todo lo que llevaba acumulado en la mochila del día.
si te digo la verdad creo que eso del perfil es una tontería, interesarse por la profundidad de la vida y de vez en cuando querer no pensar no son incompatibles.
klee ha dicho que…
la verdad es que a mi este tipo de programas me producen alergia, o verguenza ajena, no se muy bien, lo cierto es que se me hace una verdadera tortura soportar a estos absurdos personajes.
un saludo.
PENSADORA ha dicho que…
Es verdad Rebeca, no son incompatibles, más bien creo que son necesarios y complementarios.

Klee, eso mismo pensaba yo, pero mira tú por dónde un día tuve que cambiar de opinión.

Ahora bien, tengo que admitir que desde que mi rutina ha vuelto a ser la misma y Pensmother está mejor, ya no lo he vuelto a ver.

Saludicos y gracias por pasar!

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