El cuidado de la mente no es una moda
Enciendo el ordenador, abro el navegador y además de las típicas estupideces sobre vidas de mentira y culebrones políticos, me encuentro tres o cuatro anuncios y titulares sobre el cuidado de la salud mental. ¡Eureka! Tenemos una nueva moda y podemos entretener a la burguesía. En ningún caso diré que no sea importante. Lo es. Mucho. Pero precisamente por lo importante que es y por lo que desde mi condición de persona afectada me importa, os diré que me repatea que ahora vayamos a banalizar como hemos hecho con tantas otras cosas. Las influencers ya no sólo nos enseñan moda, decoración y deporte. Ahora son expertas psicólogas armadas de positivismo barato e irreal que añade un inalcanzable más para quienes no sean capaces de delimitar lo serio de lo banal. Los telediarios se han apoderado de una realidad que siempre ha estado allí y que están aprovechando para alinearse con lo que nos quieren vender. Sí diré que agradezco que se visibilice una cuestión muy importante: la falta de