Fechas
De repente un día una puede encontrarse hablando de fechas
pasadas como los profes de historia.
Como esas clases sobre la Guerra Mundial que, de niña, parecían allá a
lo lejos cuando apenas habían pasado cuatro décadas. En mil novecientos cuarenta y cinco yo no
había nacido, pero en mil novecientos ochenta y cinco ya estudiaba historia y
en mil novecientos noventa y cinco empezaba a trabajar. Una puede sentirse importante ante la idea de
haber vivido ya tantas fechas distintas y lejanas pero no sé si eso es bueno o
malo.
¡Jo con la crisis decenal!
Comentarios
Depende de si uno está a gusto o no con lo que ha vivido y en consecuencia con la edad que tiene, si sabe asumir esa edad y si es consciente de que somos simple trásito: el relativismo es fundamental para no entristecerse ante el paso del tiempo.
(Pfff, qué intenso, no?)
Besos!
Asín Es. No hay que dedicarle ni un minuto más a esa certeza.
Las crisis son necesarias para aprender a vivir el presente. Claro, eso quienes queremos aprender.
Salud y orujo a tod@s!