Desde que me estoy acercando inexorablemente a la madurez, observo más a mis mayores que sin querer me hacen a mí misma cada vez más mayor. Tengo una manía muy fea de intentar adivinar el futuro y en esas me encuentro observando a mi madre para intentar imaginar cómo seré yo de aquí a tan solo treinta años. En mis observaciones he notado algo de lo que no me había percatado y es la falta de respeto que tenemos hoy en día a nuestros mayores. Dándoles prisa en la carretera, riéndonos de ellos en sus vacaciones de IMSERSO, quejándonos de su lentitud en el súper… Resulta, Señoras y Señores que todos, sin excepción, todos y cada uno de nosotros llegaremos algún día (si no nos pasa nada antes) a viejos. Y todos, sin excepción, desearemos respeto y cariño para esos últimos años. Así que, Señoras y Señores, respeten a sus mayores y cuando se les pase por la cabeza reírse de ellos, abandonarlos, pasar, no entenderles, no cuidarles o no abrazarles, recuerd...