Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2013

Hazlo tú

Imagen
Me gustan las críticas.  Me parece que una buena crítica es favorable para el desarrollo de un artista.  Ahora bien, esas críticas que vienen de aquellos que no entienden y sobre todo que no sienten lo que están criticando (cosa que muy a menudo se hace extremadamente evidente) a veces me exasperan, ante lo cual me gustaría contestar “¿ah sí? pues hazlo tú mejor, a ver”.

En Cuerpo y Alma

Imagen
A veces dudo si realmente semejante separación es posible.  Quienes no profesamos religión, creemos poco en el Alma como una cuestión incorpórea ajena a lo celular.  Aunque esto no significa que no creamos en un “algo” que todavía no hemos podido explicar.  Será cuestión neuronal. Un religioso cualquiera (entendiendo “cualquiera” como de cualquier religión) estaría en desacuerdo con semejantes ideas pero los que somos más de necesitar pruebas para creer y la fe la dejamos para otros, nos inclinamos más por la idea de que el Alma reside en nuestro cerebro y, por ende nuestras neuronas.  De esta manera el Alma no dejaría de ser una parte más de nuestro Cuerpo, terrenal o no. Teniendo en cuenta que los pensamientos o más bien el subconsciente son atemporales (intenten calcular cuánto dura un sueño y se sorprenderán), efectivamente, el Alma sería eterna y de allí ese carácter incorpóreo. Palabra de Pensadora.

Me gustan los jueves

Imagen
Soy persona de rutinas, pero sólo de unas pocas y no siempre las mismas.  Todo depende de la estación, del estado de ánimo, de las apetencias… Últimamente tengo una nueva rutina.  Los jueves: noche de la 2.  Primero ponen una seria documental titulada “Planeta Humano” muy antropológica pero muy fácil de ver.  Después es el turno de un nuevo programa magazín o "varietés" (a gusto del consumidor) llamado “Torres y Reyes” por los nombres de sus presentadores que bajo un tema en particular desarrolla varias secciones desde una entrevista, pasando por una tertulia o la emisión de un corto de cine, hasta una clase magistral o una actuación final. ¡Que ganas tenía de tener ganas de ver la tele! Recomiendo mucho los jueves de la 2.

Quieta

Imagen
Hace unos días (o meses, parece que por este blog el tiempo últimamente pasa raro) hablaba sobre el superhombre y esa especie de envidia sana que me daban estos ejemplares pseudos-perfectos.  Hoy me acerco a esa cuestión, pero desde la autocrítica. Empieza el otoño y, aparte de mi tradicional “ataque de la marmota”, extrañamente noto ganas de mal tiempo, de quietud.  Y esque llevo un tiempo que no paro (casi como una supermujer), cosa que es buena porque eso significa que estoy viviendo pero para disfrutar lo vivido hace falta retrospectiva y para tenerla hace falta quietud. De vez en cuando hay que “estar quieta”, tomar aire y repasar lo vivido para ordenar recuerdos, ideas y sobre todo profundizar en lo aprendido. Palabra de pensadora

INSTINTO Y ADAPTACION

Imagen
Últimamente me ha dado por pensar en el hombre moderno y nuestra poca o inexistente relación sensorial con el medio.  Claro está, entendiendo por “medio” nuestro hábitat original que era el monte y no otro. Hoy en día son los artilugios quienes nos guían, no nuestros instintos.  Sin embargo, hubo un tiempo en que eran nuestros sentidos e instintos lo que nos guiaba de manera que podíamos reaccionar lo mismo ante un olor que ante una idea que no sabíamos de donde salía porque nacía en nuestro interior en forma de instinto. No entraré en el “mejor o peor”, me da por pensar que todo es cuestión de adaptación y que de la misma forma que hemos perdido esos instintos que nos ayudaban a sobrevivir y adaptarnos a nuestro medio original, hoy hemos desarrollado otras habilidades que nos ayudan a sobrevivir y adaptarnos en un medio tan especializado como el que nosotros mismos nos hemos construido. No olvidemos que antaño, el hombre fue capaz de descubrir tierras a miles de kilóme

El último beso

Imagen
Una nunca sabe cuál es verdaderamente el último día del verano mientras los primeros fríos llegan con las sandalias aún calzadas. Una nunca sabe que aquel que se dio casi por rutina como quien se rasca la cabeza al despertar, fue el último beso.  Pero hay un “último” que una sí puede elegir a voluntad, yo diría más bien a “fuerza de voluntad”: el último cigarro. A lo mejor sólo por vengarme de todos esos últimos besos robados, decidí hacer una auténtica ceremonia y hace una semana, a las 22h36m. de un día como ayer, encendí mi último cigarro mirándolo y odiándolo como a un novio infiel y cuando lo apagué, no sentí nada.  Como cuando se da ese último beso sin saber que es el último.