BLACK HAWK DOWN
Me gusta el cine bélico, sí, lo confieso. Pero no porque me imagine a mí misma armada combatiendo por la gloria de mi país. Ni mucho menos porque admire a los valientes soldaditos que dan su vida y sufren tanto por sus compañeros, su patria y su bandera. NO, no es este mi pensar.
Me gusta el cine bélico porque cada vez que veo una de estas películas más me reafirmo en mi condición de pacifista. Sufro mucho cuando las veo, por todos los personajes, tanto por “los buenos” como por “los malos”. Porque en una guerra es difícil distinguir quién es quién y porque cada uno de esos hombres pueden entregar su vida o lo que es peor: su libertad por unos ideales que no son propios y que, propiamente, no son ideales. Menos en las guerras actuales en las que se combate por dinero, no por territorio ni por honor. No se combate por nada que realmente sea importante para la vida de cada hombre y eso es lo paradójico, que hay gente capaz de perder su vida por NADA.
Pero bueno, la intención de esta entrada no es hacer una disertación sobre las guerras y sus consecuencias, sino hacer mi alabanza a la película de Ridley Scott: “Black hawk, derribado” que volví a ver ayer. Motivos para que me guste tanto:
1.- Su contexto: no nos enseña súper héroes americanos sino una banda de hombres asustados cometiendo errores y jugándose la propia vida y la de sus compañeros por algo que no entienden y a sabiendas de que en realidad no deberían estar allí.
2.- La fotografía: las escenas que parecen quemadas por el sol, dan sensación de calor. El calor que en realidad debía hacer en aquel lugar y aquel momento, durante los acontecimientos que ocurrieron realmente durante el año 1993 en Somalia.
3.- La banda sonora: Hans Zimmer que se sale otra vez, con sonidos étnicos que me situaron muy en el lugar y varios temitas noventeros con un buen rato dedicado a “Epic” de Faith No More.
De la película me queda esa última frase que lo dice todo: “¿Hemos hecho algo útil?, nada ha cambiado…”.
Y para terminar y darle marcha a este nuevo fin de semana, ese pedazo de canción que tanto me gusta y no recordaba:
Me gusta el cine bélico porque cada vez que veo una de estas películas más me reafirmo en mi condición de pacifista. Sufro mucho cuando las veo, por todos los personajes, tanto por “los buenos” como por “los malos”. Porque en una guerra es difícil distinguir quién es quién y porque cada uno de esos hombres pueden entregar su vida o lo que es peor: su libertad por unos ideales que no son propios y que, propiamente, no son ideales. Menos en las guerras actuales en las que se combate por dinero, no por territorio ni por honor. No se combate por nada que realmente sea importante para la vida de cada hombre y eso es lo paradójico, que hay gente capaz de perder su vida por NADA.
Pero bueno, la intención de esta entrada no es hacer una disertación sobre las guerras y sus consecuencias, sino hacer mi alabanza a la película de Ridley Scott: “Black hawk, derribado” que volví a ver ayer. Motivos para que me guste tanto:
1.- Su contexto: no nos enseña súper héroes americanos sino una banda de hombres asustados cometiendo errores y jugándose la propia vida y la de sus compañeros por algo que no entienden y a sabiendas de que en realidad no deberían estar allí.
2.- La fotografía: las escenas que parecen quemadas por el sol, dan sensación de calor. El calor que en realidad debía hacer en aquel lugar y aquel momento, durante los acontecimientos que ocurrieron realmente durante el año 1993 en Somalia.
3.- La banda sonora: Hans Zimmer que se sale otra vez, con sonidos étnicos que me situaron muy en el lugar y varios temitas noventeros con un buen rato dedicado a “Epic” de Faith No More.
De la película me queda esa última frase que lo dice todo: “¿Hemos hecho algo útil?, nada ha cambiado…”.
Y para terminar y darle marcha a este nuevo fin de semana, ese pedazo de canción que tanto me gusta y no recordaba:
Comentarios
un beso desde la isla de la lluvia
Y ya me dirás la música, a mi me encanta.
Besos.
Lo del cine bélico tiene su cosa, a quien le mola, le mola y a quien no, pues no.
Sí Pez, si no te gusta el cine bélico puede resultar larga y no me digas que no es dura la escena de cuando asaltan el segundo helicóptero.
Otra recomendación es "PLATOON" para quien no la haya visto.
El cine bélico ni me va ni me viene. En general no tengo muchos problemas con los géneros de cine, lo importante es la película. Así que puede haber pelis de guerra buenas y malas, lo mismo que con cualquier otro estilo. En cualquier caso, esta no la he visto (la verdad es que veo películas muy de higos a brevas, es lo que tiene estar en mil cosas).
Saludos
Sí, sí dura y larga la quisieran algunos JAJAJAAJ!!!!
Y me abstendré de hacer más chistes de durezas y larguras, jajajaj.