ISLANDIA, PRIMER DÍA
Primera parada: Reykjavik. Bonita y moderna ciudad, me sorprendió por lo verde de su entorno y las casitas de colores. Muy nor-europea.
Antes de seguir, recomiendo escuchar la siguiente canción para ponerse en situación, es muy rara, pero es de un grupo local, así nos ponemos islandeses, porque son así, raros pero encantadores:
Antes de seguir, recomiendo escuchar la siguiente canción para ponerse en situación, es muy rara, pero es de un grupo local, así nos ponemos islandeses, porque son así, raros pero encantadores:
La catedral que están "apañando" con un tal Ericson (hijo de Eric el pirata barbarroja) a la entrada. Se supone que el Ericson este fué el primero en pisar América, concretamente, Alaska.
Las calles del centro de la ciudad van a parar al mar, siempre tranquilo. Da muy buen rollo.
Esta foto está hecha a las 11:30 de la noche (bueno, de lo que sería la noche aquí). Ese agua no es un lago, es el mar, siempre parecía un espejo.
Y hasta aquí por hoy, no tengo más tiempo. Sólo reseñar que Reykjavik es una ciudad tranquila pero con mucha marcha, hay un montón de bares y la gente es muy simpática pero a partir del cuarto o quinto cubata. Me reservo las fotos de la "noche" que salí de marcha porque son malas de narices. Más entregas en próximos días, lo prometo.
Comentarios
Electra, imagínate estar de juerga a las 3 de la mañana y que sea de día como si estuviera amaneciendo... ahí no había quien se fuera a dormir ¿para qué si es de día? jejej!
saludos
PD: están bastante bien los Sigur Ros. Mi canción favorita suya: Svefn-G-Englar'.